Las emociones se pueden entrenar: lo que tú sientes guarda una estrecha relación con lo que piensas y lo que haces.
Tus emociones son también el resultado de aquellos aspectos de tu realidad en los que fijas la atención.
Cuando modificas tu foco de atención y aprendes a pensar de otra manera, cambias tus emociones y tu conducta.
A veces las circunstancias no se pueden cambiar, pero siempre puedes cambiar la actitud con la que te enfrentas a ellas; es en esos momentos en los que resulta especialmente útil enfocar los hechos de tal manera que tu actitud sea más resolutiva y te sientas mejor.
Aprenderás la importancia de la atención en la construcción de tu realidad y en tu autoestima.
Entrenarás y realizaremos seguimiento diario de tu atención, para ir cambiando progresivamente el foco de la misma.
Aprenderás sobre cuales son las emociones que te ayudan a a sentirte bien.
Entrenarás diariamente las diferentes emociones positivas y haremos un seguimiento de tu trabajo.
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